Edición 1122 Segunda Semana de Julio 2025


Cuautla, Mor.-“No es una tarea sencilla”. “Hoy, vía la extorsión, se le cobra a todo el mundo, ricos y pobres, desde los productores de aguacate, nopales, hasta los fabricantes de zapatos, desde grandes a pequeñas empresas, desde restaurantes de lujo hasta changarros, se pone precio a los materiales de construcción, a las tortillas. Las investigaciones que desarrollen las fiscalías estatales, serán fundamentales en este sentido porque se tienen que romper las tramas de complicidad que existen. entre autoridades locales y criminales para avanzar con certidumbre”. Estas son reflexiones de analistas y estudiosos de la cosa pública y del crimen en México.
“La extorsión requiere medidas adicionales y distintas a las aplicadas con buenos resultados en otros casos delictivos. El Estado debe empeñar todas sus capacidades en la lucha contra esa lacra no sólo por el número y la persistencia de las extorsiones, sino por su caracteres especialmente perniciosos; cuando una persona o un negocio son obligados a pagar derecho de piso, al crimen organizado para que les permitan continuar las labores de las que obtienen sustento, no sólo se afecta a las víctimas directas, con el cierre de empresas o el achicamiento de sus actividades a causa de la coacción impacta en comunidades enteras por la pérdida de empleos e inversiones, con el consiguiente desplazamiento de personas y capitales hacia zonas consideradas más seguras”.
“Por otra parte, a esta modalidad de extorsión; presencial; en que sujetos armados amenazan directamente a sus víctimas se suman las extorsiones fraudes virtuales, consistentes en llamadas telefónicas o mensajes de texto que hacen creer a los estafados que ellos o sus seres queridos corren un riesgo si no entregan las cantidades que les solicitan. Para combatir con eficacia la extorsión es preciso dilucidar las causas de que este delito se muestre resistente a las estrategias que han asestado severos golpes al narcotráfico, el huachicol y otros ilícitos. Es posible, por ejemplo, que el auge de las coerciones o extorsiones, refleje una obligada diversificación de actividades ilegales ante el declive de otros giros ilícitos.
También cabe pensar que responda a la documentada dispersión de los viejos cárteles en pequeñas células descentralizadas que medran en cotos territoriales mucho más limitados y que, al no poder manejar actividades de gran escala, explotan directamente a los ciudadanos sin relación alguna con el mundo criminal.
También es necesario establecer la manera en que las extorsiones virtuales se ven potenciadas por tecnologías de comunicación que dan acceso a millones de números de teléfonos móviles desde call centers que pueden montarse con una inversión mínima. A partir de datos que expliquen el auge de las extorsiones, deben emprenderse todas las acciones pertinentes para erradicar este flagelo que desgarra el tejido social y amaga con descarrilarlos avances en materia de fomento a la economía y reducción de la pobreza. Mientras la población no pueda generar ingresos y realizar sus actividades cotidianas sin miedo a padecer de amenazas y fraudes, el potencial del país se verá lastrado por la desconfianza y la incertidumbre.
El PAN celebró que la presidenta Claudia Sheinbaum haya reconocido que su gobierno no ha podido disminuir la extorsión y que haya anunciado el envío al Congreso de una ley que ordena que ese delito sea investigado de oficio. “Qué bueno que el gobierno reconoce que este ilícito ha crecido en años recientes en al menos 60 por ciento, que es momento de trabajar poner manos a la obra para detenerlo”, dijo el diputado Héctor Saúl Téllez, coordinador económico de la bancada azul en San Lázaro. Y agregó, “Es urgente expedir una Ley General de Extorsión que permita articular acciones federales y locales, establecer penas claras, eliminar las llamadas puertas giratorias. La central de patrones dice que los datos reflejan con contundencia la gravedad de esta problemática: cada día 32.3 personas son víctimas de extorsión, lo que, en conjunto, ha generado pérdidas superiores a 26 mil millones de pesos en 2024. Esperamos que los primeros ocho estados donde se aplicará esta estrategia sean el punto de partida para una cobertura nacional. Esas ocho entidades, que concentran 66 por ciento de las extorsiones, son: Guanajuato, Estado de México, Nuevo León, Ciudad de México, Veracruz, Jalisco, Guerrero y Michoacán”. Lamentablemente no aparece el estado de Morelos gobernado por la primera mujer en el puesto, Margarita González Saravia.